Sé Valiente, Karen

Sé valiente, Karen, tal vez es todo lo que tienes que aprender en este momento de la vida, sé valiente. Usa todas las herramientas que has aprendido y conseguido a través de experiencias, vivencias, amigos, lecturas, terapias... Sé valiente, mira la vida a los ojos, mira la vida a sus múltiples ojos y asume la realidad con valentía. Párate firme, centra tu fuerza en tus ovarios y en tus tripas, hazle caso a las tripas y, sin miedo, vive cada día como es, sin querer cambiar la realidad, porque esta resistencia te tiene donde estás hoy, y esta no eres tú. No tienes que serlo, no tienes que ser una persona que se siente desamparada, no tienes que ser una víctima de las circunstancias, no tienes que ser esta versión reducida de tu ser, porque te ves y te sientes apagada, opacada y asustada. 

Ocupa con la fuerza que llevas en tus tripas todo el lugar que te corresponde en el mundo y dedícate a llenarlo de amor, de amor por ti, y brilla Karen, brilla, porque en la tristeza también puede haber luz. Pero en el sufrimiento no. Date la opción, Karen, de coger el toro por los cuernos, acoge ese miedo a la soledad, al abandono, a que no te amen, a que no te reconozcan, a que no te valoren, a no ser importante, y trata con cariño a ese miedo, pero no permitas que tome el control y te domine. Párate, Karen, que ya llevas mucho tiempo abandonando tu ser y tu luz por poner otras cosas y personas en el centro de tu vida. Tu papá te enseñó a ser valiente, honra entonces su memoria asumiendo su muerte sin miedo. Asume todo lo que te asusta, míralo, entiéndelo y dale la vuelta, la realidad está ahí, no intentes cambiarla, no puedes, lo único que puedes hacer es ser valiente, y seguir construyendo tu vida y ser feliz.

Ámate, Karen, sánate, Karen, porque solo tú puedes hacerlo y tienes cómo. Tú sabes cómo. No le huyas a la vida. Acepta la vida con lo que llega, pero no te permitas, nunca más, que las personas y las circunstancias se adueñen del control y de tu paz. La libertad interior es un camino que debes emprender sola, y sin miedo. Adentro de tu ser, en tu corazón, hay una luz y una fuerza que te va a levantar, acógela, sé valiente, porque cogerla implica aceptar que hay cosas en tu vida que te duelen, pero date la opción de que no te controlen.

Sé valiente Karen, sé valiente, que la vida se pone difícil pero también se pone bonita, y no le temas a aceptar la realidad. Todo va a estar bien. 

 

 


Comentarios

Entradas populares de este blog

Mujer incómoda

El día de mi santo

Plenitud