Amanda, Xiomara y Enrique

Dedico esta entrada a 3 youtubers: Amanda, una española, Xiomara, una colombiana y Enrique, un mexicano. Llegué a ellos por recomendaciones de YouTube el año pasado cuando andaba desesperada tratando de buscar respuestas. La pregunta que me hacía, que les hacía a mis amigas, a los ángeles y al que se me cruzara por el camino, era una retahíla de elucubraciones sobre los sentimientos de quien era mi pareja en ese entonces, me encontraba buscando la manera de retener el agua del Río Guatapurí entre mis manos, es decir, cuando andaba desesperada tratando de retener a una persona a mi lado, tratando que todo fuera perfecto y rogando a todos los dioses que no dejaran que se fuera de mi lado. Sufrí tanto en esa temporada, tal vez no tanto como cuando intentaba retener a ese marido Montemariano que finalmente hizo un hogar y tiene tres hijos con la persona que me causó más pesadillas que Fredy Kruger. Así de desesperada estaba, así de ansiosa, así de angustiada. La historia se repitió, con algunas diferencias, un poco menos humillante esta vez, un poco menos indigna, pero igual de mal enfocada. 

La situación no era desesperada el año pasado, pero mi inseguridad me llevó al límite, la ansiedad se convirtió en una nube negra, densa, maloliente y pegajosa de la que no lograba desprenderme. Era desesperante, no lograba hacer consciencia de mi desespero, no veía lo que pasaba con claridad y esa misma sensación fue invadiendo la relación hasta que la hizo algo desagradable, al punto que me dejaron a través de un mensaje de WhatsApp, al que respondí sin mucha dignidad y con mucho dolor en el alma con algún intento de comunicación no correspondida. Después de eso entendí que el camino era el silencio y seguir en la terapia y en el camino hacia adentro. Fui protagonista, no solo en esta oportunidad, sino en varias, de la famosa profecía autocumplida. Y es que cuando nos encontramos tan desesperados por algo que se nos sale de control no sabemos de dónde echar mano. Hoy, con la serenidad que me acompaña esta noche, me digo a mí misma, has aprendido algo, es algo que te va a servir toda la vida y nunca más volverás a esos agujeros negros que conoces bien. Cuando llegue nuevamente el agujero negro ya sabes dónde están los interruptores. Cuando eso pase, KAREN, ya sabes donde prender la luz. 

Agradezco a los youtubers que menciono pues llegué a ellos, honestamente no sé muy bien cómo, y me daba mucha vergüenza reconocer que pasaba más tiempo del día viendo estos videos que leyendo algo que me edificara en otros aspectos más intelectuales de la vida, pero pues nada, la vida se trata de aprender y hay que echar mano de lo que se presente para hacerlo. Los videos de Xiomara tienen la particularidad de tener títulos muy llamativos, cosas como: "¿Se fue? así vuelve sin buscarlo ni rogarle https://www.youtube.com/watch?v=9KIsykViHbk o "Causa ansiedad por ti", y lo que me encanta y la razón por la que los seguí viendo es que me llevaron por el camino de la mejor estrategia posible en el juego del amor. Esa estrategia, infalible, es la de la apuesta por la historia de amor que nunca se termina, la del verdadero amor eterno e inolvidable, la del verdadero cuento de hadas, y es el viaje del Amor propio. Yo de verdad no entendía hace un año de qué se trataba ese viaje, he ido entendiendo y entre otras muchas cosas, gracias a la insistencia de los videos de estas tres personas en que la estrategia ganadora es siempre la de quererse a uno mismo. En las tantas jornadas de ansiedad y desespero, veía estos videos en un loop desquiciado para salir de mi cabeza y buscar respuestas, y en ese mismo torbellino encontré el descanso, no todos los días, no permanente, pero sí cada vez más frecuente, más constante y cada vez es más fácil y más rápido salir de esos estados. Voy comprendiendo, a mi propio ritmo, algo muy importante y profundo y es que todas las respuestas están adentro, que todo el control está adentro y que debo seguir trabajando en ello. Los budistas le dicen hacer consciencia, estar presente, los psicólogos amor propio, el mensaje es el mismo.  

Tener 44 años y estar sufriendo por amor parece una estupidez, pero no hay edad para ser pendejo. Como lo escribí hace un rato, esto es lo que hay, y no pasa nada. Estas herramientas que parecen de adolescente me han ayudado a encontrar un mejor y más tranquilo camino en la vida y en el amor, y espero que poco a poco se refleje en todas mis relaciones. En eso estoy. 

Enrique Delgadillo es un gomelo mexicano que insiste mucho en la necesidad de trabajar en uno mismo, en ponerse en el centro. Amanda Merbú insiste en la necesidad de hacer este trabajo personal de manera genuina, no con la intención de que alguien regrese o de retener al otro. Y Xiomara Villanueva hace énfasis en la importancia de tomar distancia, Amanda también, observarse y darse tiempo para conocer la mejor versión de uno mismo, trabajar por ella y no volver a necesitar que nadie, nadie!, nos de lo que no somos capaces de darnos a nosotros mismos. Hay un poema de Mario Quintana que dice: "el secreto de la primavera no está en correr detrás de las mariposas, el secreto está en cuidar el jardín para que ellas vengan hacia ti". Xiomara y Enrique lo mencionan con  frecuencia. Es tan cierto, no hay nada más bonito que la propia compañía y solo así seremos buena compañía, cuando la propia vida sea un jardín agradable y hermoso. 

Me declaro un ser en construcción de su propio jardín. 

Amanda Merbú https://www.youtube.com/c/AmandaMerbu

Xiomara Villanueva https://www.youtube.com/channel/UC-us_4LGKQ-GSbZN1vEz82Q

Enrique DElgadillo https://www.youtube.com/channel/UC-hjRfCoajsJvMKeSGVtDwA

 


Comentarios

Entradas populares de este blog

Mujer incómoda

El día de mi santo

Plenitud